Terapia con adolescentes
La adolescencia es una etapa de grandes cambios emocionales, físicos y sociales. En ese proceso de construcción de la identidad, pueden surgir conflictos internos, dificultades en las relaciones o malestar que cuesta expresar. La terapia ofrece un espacio de confianza donde el adolescente puede sentirse escuchado sin juicios y comenzar a comprender lo que le ocurre.
¿Cuándo puede ser útil acudir a terapia?
Algunos signos que pueden indicar la necesidad de acompañamiento psicológico son:
- Ansiedad, tristeza o cambios bruscos de humor.
- Dificultades en el colegio, falta de motivación o absentismo.
- Problemas de autoestima o inseguridad.
- Conflictos familiares o sociales.
- Conductas de riesgo o señales de aislamiento.
¿Cómo es el proceso terapéutico?
El trabajo terapéutico con adolescentes requiere empatía, escucha activa y respeto por su mundo interno. Se crea un espacio seguro en el que puedan expresarse libremente, encontrar sentido a lo que viven y desarrollar recursos personales para afrontar sus desafíos.
Además, se trabaja de forma coordinada con las familias siempre que sea necesario, respetando los tiempos y el proceso individual del adolescente.